Relato del Estado Bolívar (Autopista Cd. Guayana - Cd. Bolívar)
También me relata mi abuela que en otra ocasión iba con mi abuelo y una de sus hijas vía Ciudad Bolívar, siempre acostumbraban a detenerse en una casa vieja en ruinas donde abundaban los arboles de mango y por ende la fruta, siempre de camino a Ciudad Bolívar esa era su parada obligatoria nunca se dieron la tarea de explorar el lugar ya que lo único que les importaba era la fruta, recuerda mi mama que cerca de la casa había un pequeño paredón a medio terminar, un día recogiendo mangos ve un señor que está sentado en el paredón leyendo al parecer un periódico.
a lo que mi mama se acerca le saluda con un buenos días y le pregunta usted es de por aquí a lo que contesta yo vivo allá
abajo sin quitarse el periódico que le cubría la cara y el torso, se levanta y baja el periódico mi madre se percata de que aquel hombre le faltaba parte de la piel entre las costillas y el estómago dejando ver sus huesos y órganos, se voltea y salta el pequeño paredón mi abuelo que también presencio la escena, se acerca al paredón y ve que del otro costado tiene como uno siete metros de alto y en el fondo no está el cuerpo de aquel individuo.
mi abuelo tomo a su hija su esposa las monto en el auto y se regresó a Ciudad Guayana, después de un tiempo dice el que regreso solo al lugar y volvió a ver al misterioso amigo sentado leyendo el diario sabiendo mi abuelo de lo que se trataba se persigno se montó en el auto y se fue del lugar no sin antes dejar una vela blanca para el alma en pena que allí habita.
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